lunes, 7 de septiembre de 2009

RELATO 60: "TODOS LOS BARES SON EL MISMO TEMPLO"

Buenos días, amigos del murciélago.

Esta semana quisiera hablar sobre una curiosidad.
Muchas veces me han preguntado: ¿Cómo se te ocurrió eso? Y casi nunca respondo a la pregunta. Hoy lo haré, pero a través de un relato.

Supongo que es una pregunta común que se suele hacerse a los escritores. Pues bien, sólo puedo decir que, en mi caso, la mayor parte de los relatos se gestan con una chispa, y esa chispa suele ser una imagen; algo que veo, me llama la atención (un suceso, una noticia, un gesto, una actitud) y a continuación empiezo a imaginar “¿y qué pasaría si…?).

Pues bien, ese “¿y qué pasaría si…?” es la base de todo cuento. Es LA PREGUNTA. Recurrid a ella con frecuencia y veréis que, siempre (y cuando digo “siempre”, afirmo que esto es una verdad absoluta), más tarde o más temprano, os responderéis a vosotros mismos con una historia. Unas valdrá la pena escribirlas y otras será mejor desecharlas, pero ya tenéis el germen creador.

Luego, por supuesto, toca ponerse a trabajar. El resultado final dependerá de las destrezas que habéis aprendido y de vuestro instinto o aptitudes, pero al menos tenéis algo sobre lo que trabajar. Nunca empecéis a escribir sin un objetivo, sin una idea bien definida, porque probablemente nunca terminéis lo que estáis escribiendo.

Si lo tenéis claro, una vez empecéis, podéis dejaros llevar por la inspiración, pero nunca antes. No se puede confiar en la inspiración sin antes llamar a la puerta de nuestro subconsciente: “TOC_TOC: tengo una idea, échame una mano”. Será esa vocecita interior la que os dirá que hay que hacer a partir de ese momento.

Una vez un tipo preguntó a Stephen King algo así: “¿Cómo es que, sabiendo escribir tan bien, construye usted esas historias tan macabras?”. A lo que el maestro del Terror respondió: “¿Qué le hace pensar que puedo elegir?”

El orden correcto es PENSAR EN LO QUE SE QUIERE ESCRIBIR (PENSAR EN EL CONTENIDO) y luego DEJARSE LLEVAR POR LA INSPIRACIÓN (EN LA FORMA). El proceso creador no responde ante las leyes matemáticas. En este aspecto: EL ORDEN DE LOS FACTORES SÍ ALTERA EL PRODUCTO.

Así que os dejo este relato, que habla precisamente del proceso de creación de una historia, y todo ello dentro de otra historia (otro meta-relato, damas y caballeros), pero que también habla de algo más. Para ser sincero, he de reconocer que pocos de mis lectores habituales supieron entenderlo bien hasta que alguien desveló el quid de la cuestión (¡Bravo por Carol!), así que lo revisé para hacerlo menos críptico. Pude haberlo convertido en algo totalmente obvio, pero finalmente decidí dejar un poco al lector. Así que vamos a probarlo con vosotros. No os cortéis y opinad. Echad una mano a vuestro amigo el Murciélago: si nadie lo entiende quedará claro que necesita otra revisión.

Ahí va eso:





TODOS LOS BARES SON EL MISMO TEMPLO




***

"Encorvado, las manos en los bolsillos del abrigo. No había entrado nunca allí, y por tanto estaba bastante seguro de no encontrarse con ningún conocido (había caminado doce manzanas precisamente por eso). Le gustaba rodearse de gente, pasar desapercibido y beber sólo. Era su forma de celebrar cada final de capítulo, y también una forma de absorber el material suficiente para poder continuar escribiendo sin que los detalles se perdieran, sin que los colores destiñeran, sin que la trama fuera quedándose en los huesos, convertida en un esqueleto bien ensamblado, pero falto de vida [...]"

***





DESCARGA EL RELATO COMPLETO PINCHANDO AQUÍ Y ENVÍASELO A TUS AMIGOS Y A TUS ENEMIGOS:



TODOS LOS BARES SON EL MISMO TEMPLO





Y por hoy es todo. No quiero aburriros... más de lo necesario.
Volved, que aquí os espero con...

¡UN CUENTO A LA SEMANA!

4 comentarios:

Deprisa dijo...

Un buen cuento que puede responder esa pregunta a más de uno.

A mí los relatos se me ocurren de manera inesperada, y me puede inspirar cualquier cosa, una persona, una canción, e incluso un videojuego...

La Musa tiene muchas formas.

Un saludo,
Deprisa

Anónimo dijo...

Pues aparte de que me ha gustado mucho, creo que es muy fácil de entender lo que está pasando, desde las primeras líneas...no es crítica, eh? Digo sólo que me esperaba algo más complicado, por tu explicación.
La historia me parece genial, inspiradora, y sobre todo...tan rematadamente familiar esa sensación...
Un saludote!

Anónimo dijo...

Ya se que pasa por tu cabeza cuando en medio de una conversación pierdes el mundo de vista durante unos segundos! Estaré atento a ver si luego se corresponden con las futuras joyas que me encuentre por aquí.

SERGI ÁLVAREZ dijo...

Gracias a los tres por vuestro granito de arena.

DEPRISA: sería interesante que un puñado de quinta-columnistas como nosotros se reunieran para hablar sobre "cómo se nos ocurren estas cosas". Es cierto, la Musa tiene muchas formas.

DM: Puedes criticar lo que quieras, amigo DM, yo encantado. Lo que dices me lo tomo como un elogio. Quiere decir que la segunda revisión del cuento funciona (te aseguro que de 6 0 7 lectores simunltáneos, solo 1 lo entendió... y eso no puede suceder con un cuento). Gracias, company, y sigue con el Blog, que va molando mucho.

MAESTRO: Espero que te llegara tu cuento y lo conserves como oro en paño. Ahora te toca a tí colgarlo, jejeje...

Un abrazo!